El regreso al colegio

Escrito el 09/09/2024
Esther Moral


 El regreso al colegio después de un período prolongado de vacaciones puede ser un momento de gran ansiedad para muchos niños y niñas. Esta ansiedad puede manifestarse de varias formas y ser causada por múltiples factores. Las familias deben estar atentas los días antes de volver a la escuela para ayudarles a tener una transición saludable. Para la mayoría de los niños, este sentimiento de ansiedad desaparece a medida que avanza el año escolar, pero habrá que prestar especial atención a aquellos niños que presentan dificultades académicas y/o sociales, ya que pueden anticipar situaciones en la escuela que ellos perciben como amenazantes.

Veamos, en primer lugar, por qué los niños sienten ansiedad al volver a la escuela.

1. Cambios en la rutina: Después de dos meses de vacaciones, los niños se acostumbran a una rutina más relajada y menos estructurada. El cambio abrupto a una rutina escolar puede ser abrumador para muchos, mayormente para los que tienen más dificultades con los cambios en las rutinas (niños y niñas con trastorno del espectro autista, por ejemplo).

2. Separación de los progenitores: en niños más pequeños, la separación de la familia puede causar ansiedad. La ansiedad por separación es normal y, aunque generalmente disminuye con el tiempo, puede ser intensa al principio. Será importante que cuando dejemos a los niños en la escuela, la despedida sea lo más breve posible y que les aseguremos que nos volverán a ver al finalizar la jornada escolar.

3. Expectativas académicas: El miedo a no cumplir con las expectativas académicas, tanto propias como de los padres y profesores, puede generar ansiedad. Los niños pueden preocuparse por las nuevas asignaturas, exámenes y deberes.

4. Interacciones sociales: Las dinámicas sociales en la escuela, como hacer nuevos amigos, integrarse en grupos o afrontar conflictos con los compañeros, pueden ser una fuente significativa de ansiedad. Si han ocurrido episodios de acoso previos o experiencias negativas en la socialización, el niño o niña puede sentirse ansioso ante la perspectiva de volver.

Cómo sabemos que nuestros hijos/as están ansiosos ante la “vuelta al cole”?

Como se ha mencionado anteriormente, la ansiedad en los niños puede manifestarse de varias maneras, y no siempre es fácil de identificar. A nivel físico, podemos apreciar que nuestro hijo/a empieza a sentir malestar en la barriga, náuseas, cambios en el apetito, fatiga y problemas para dormir. La irritabilidad y el llanto suelen ser habituales, así como el rechazo a ir a la escuela o la búsqueda de excusas para quedarse en casa.

Estrategias y pautas para las familias para manejar la ansiedad:

1. Preparación gradual: Comenzar a ajustar la rutina de los niños unos días antes del inicio de clases, incluyendo cambios en los horarios de sueño y actividades diarias, puede ayudar a hacer la transición más suave.

2. Comunicación abierta: Fomentar un ambiente en casa donde los niños se sientan seguros para expresar sus miedos y preocupaciones. Es importante escucharles y validar sus emociones.

3. Enseñar técnicas de relajación: introducir a los niños a técnicas simples de relajación, como la respiración abdominal controlada o las visualizaciones de escenas o lugares positivos, puede ayudarles a manejar la ansiedad y sentirse más tranquilos.

4. Ser un modelo: que las familias muestren entusiasmo, optimismo y transmitan tranquilidad ante el regreso escolar puede ser de gran ayuda. Los niños aprenden por imitación y perciben los estados emocionales de sus cuidadores. Hablarles sobre los aspectos positivos de la escuela les puede ayudar a hacer un mejor afrontamiento.

5. Buscar apoyo profesional: si observamos que la ansiedad del niño es grave y persiste, puede ser útil buscar apoyo psicológico profesional para proporcionar estrategias más específicas.

La ansiedad de los niños al volver a la escuela es un fenómeno común, pero manejable. Comprender las causas y los síntomas de esta ansiedad es el primer paso para ayudar a los niños a enfrentar sus miedos. Con la preparación adecuada, una comunicación abierta y estrategias de manejo apropiadas, los niños pueden tener una transición exitosa y positiva de vuelta a la escuela.

Autora: Elena Villabona ( RBEC)